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sábado, 14 de diciembre de 2013

PICO MACIÉDOME o ALTO DE PONGA (1903 m ) desde Pendones

Kike posa debajo de una imponente Haya que utiliza esta enorme piedra como soporte. Parque Natural de Redes
Ruta realizada el 3 de Noviembre del 2013
 
Integrantes: Javier, Sergio, Noelia y Kike 
 
Llegó la otoñada y el cambio de color en los bosques de la cantábrica. No podíamos faltar a nuestra obligada cita con este regalo para los sentidos.
¿Y qué mejor lugar para contemplar este esplendor paisajístico que el Parque Natural de Redes en Asturias?
....Desde luego, próximos a León existen otros tantos sitios donde poder disfrutar de los bosques; Ancares, Riaño, Sajambre, Alto Porma...
Pero había que decidirse por uno. Días antes de la marcha hablé con Javier -Paseos por las Montañas- de la posibilidad de hacer un recorrido circular al pico Maciédome, hasta entonces desconocido para ambos, de no ser por haberle contemplado repetidas veces desde la cumbre del cercano pico Tiatordos.
Javier, desde Burgos,  investigó por Internet la mejor manera de ascender a este pico, lo grabó en su GPS, fijamos fecha y hora de partida en el pueblo de Pendones (750 metros) y allí mismo que nos dimos cita.
Desde León se animaron también Noelia y Sergio. Este último, era el único del grupo que había estado ya en el Maciédome...un día y de casualidad. Ya que su primera intención, en aquella ocasión, consistía en intentar ascender en solitario al vecino Tiatordos.
 
Hasta este pueblo asturiano nos acercamos desde León, remontando el río Porma desde Puente Villarente; muy próximo a su desembocadura en el Esla, pasamos por el Puerto de las Señales; nacimiento del mismo, enlazando con el Puerto de Tarna pocos kilómetros después y descender por el asfalto siguiendo el curso de las aguas del incipiente río Nalón hasta el desvío que nos conduce al punto de reunión en Pendones.
 

Mapa de la ruta circular Pendones-Maciédome en línea de color rojo discontinuo

 
Desde el amplio aparcamiento existente en la zona baja del pueblo nos calzamos las botas para comenzar nuestra ruta a pie.
Son las 10:00 de la mañana y partimos desde una altura de 750 metros sobre el nivel del mar. Perdemos unos metros de desnivel para cruzar el arroyo de Pendones y ascender, dirección sur por la pista cementada que conduce a Vega Riba y Vega Baxio.
Tras pasar una serie de fincas con sus respectivas majadas, casi dos kilómetros después, llegamos al alto de la loma donde sale un desvío a mano izquierda por una senda.
Esta senda se encuentra señalizada con Hitos y con pinturas y marca el ascenso al Maciédome.
Primero, la senda, zigzaguea por un impresionante hayedo.
Alcanzamos la cabaña Llongar (1060 metros ) y poco rato después dejamos atrás el hayedo para salir a campo abierto siguiendo senda, donde son los Tojos y Helechos la vegetación dominante.
Las vistas hacia el valle del Nalón y las cumbres del entorno son muy atractivas.

El itinerario bordea la ladera Sur del Pico Las Coronas (1.509mts) haciéndonos pasar por la colladina de la Llana Fresnu (1.359mts) con una pequeña pradera y Majada incluida.

La senda continúa con algún tramo medio oculto por las altas escobas y se alcanza poco más adelante uno de los lugares más atractivos e idílicos de la jornada montañera; el collado de Llagu (1.533mts) situado entre el Pico el Cascayu (1.602mts) de la Peña el Quemao (1.658mts). Sobre este balcón herboso y mirando hacia el norte podemos contemplar la fascinante montaña del Tiatordos que en esta época sus faldas muestran el color ocre de un extenso Hayedo  contrastando con la blanca y pelada piedra caliza de la parte alta.
Tras la serie de retratos que realizamos en el Collado Llagu, tomamos la  senda que hacia el sureste del collado nos aproxima a la vertiente oeste del pico Maciédome y que existen dos sendas por las cuales encarar su ascenso y salvar las abruptas paredes que presentan hacia esta vertiente.
La primera de ellas la encontraremos al llegar a la primera pedrera saliendo del Hayedo por la cual enlazaremos a nuestro regreso de la peña. Continuamos a media ladera por el bosque ya que nuestra intención es ascender por la senda que recorre el cordal sur de la montaña.
No tenemos la suficiente paciencia y nos desviamos antes intentando ir más directos hacia el pico. Fuerte pendiente por el límite superior del bosque para salir metros después a una ladera recubierta de rala vegetación arbustiva.
El grupo nos dispersamos marchando cada uno como bien puede por el fuerte desnivel y al rato conseguimos enlazar con la senda hitada del ramal sur del Maciédome. El resto del camino hacia la cumbre es evidente alcanzando sin problemas el alto de la Peña a 1.903 metros.
 Mientras degustamos el merecido bocadillo disfrutaremos de unas extraordinarias vistas; Panorámicas  que en la próxima tira de imágenes que aquí publico tenéis muestra. Media hora después  emprenderemos el descenso intentando seguir el ramal  noroeste del Maciédome que desciende directo al Collado Llagu ( 1533 metros ).
A partir de aquí no distinguimos senda marcada. Tras unos fáciles destrepes no vemos nada claro la continuidad por la cresta hacia el collado. Nos desviamos a mano izquierda para perder rápidamente altura y enlazar con la senda existente en la pedrera que llega al Hayedo de la vertiente Oeste del Pico y por la cual regresamos al Collado Llagu.
Desde este punto y para variar el camino de regreso bajaremos hacia el valle de Pendones. Primero dirección norte pasando por la cabaña Recuenco ( 1330 metros ) y avanzando por un tupido bosque de Hayas, atravesar la Foz de Congostín en la misma dirección al que fluyen las aguas del arroyo que la ha modelado. Continuamos senda hacia el noroeste y luego oeste para enlazar con la pista que desciende de la Foz de Palombar siendo este el camino más frecuentado al Tiatordos. Seguimos por la pista paralela al arroyo Pendones llegando a las 18:00 horas hasta el pueblo del mismo nombre donde aparcamos por la mañana nuestro coche.

Contentos después de haber disfrutado de una estupenda jornada montañera en estos parajes privilegiados regresaremos a nuestras respectivas casas con la enorme satisfacción de haber completado este recorrido que nos ha llevado a conocer mejor el Parque Natural de Redes al que, sin lugar a dudas, regresaremos en un futuro no muy lejano.

Desnivel acumulado de ascenso: Unos 1.153 metros.

Kilómetros recorridos: Unos 11,6 kms.

 

En el pueblo de Pendones, los vecinos, ya se encuentran preparados para pasar el próximo invierno...
Hoy somos todos puntuales en nuestro punto de reunión del parking en Pendones-
Después del largo viaje en coche tenemos ansia de paseo y sumergirnos en la naturaleza desbordante que nos rodea.
A nuestro paso por las calles del pueblo no perdonamos los retratos a las curiosidades del mismo.
 
 
Contraventana labrada en una casa del alto Nalón
 

Pueblo de Pendones fotografiado desde el camino a Vega Riva

Buen dicho y bien hecho

Desde la pista retrato la impresionante Foz de Palombar en la vertiente Oeste del Tiatordos.
Por aquel "portalón" se encuentra la ruta normal que asciende al pico Tiatordos.

Los bosques caducifolios del Parque de Redes ya visten sus colores otoñales de gala.

Aisladas Majadas en nuestro camino por el valle del Arroyo Corralín

A pocos metros de abandonar la pista que se dirige a Vega Riba
 
Lugar del desvío de la pista principal para tomar esta senda que asciende a mano izquierda.
Nos sumergimos en la belleza del Hayedo. Durante nuestro caminar por la senda estamos atentos a las especies de plantas y sobre todo hongos que nos llamen la atención.
Por mi parte intento que no se me escape ninguno...aunque hoy hemos venido a completar una ruta y tampoco nos entretenemos demasiado con las exploraciones...
 
Daboecia cantábrica ¿?
Hygrophorus eberneus
 
 

Sergio y Javi marchan en primer lugar en esta primera parte del bosque con ejemplares centenarios de Robles
Bosque mixto en esta primera parte del camino donde es dominante el haya pero salpicado por ejemplares centenarios de roble melojo.

Una alfombra de hojas rojas tapiza el camino hacia el Maciédome.
Y yo me pregunto...¿Cuál os resulta a vosotros más atractiva? ¿La famosa alfombra roja que despliegan para los premios Oscar o esta acolchada "alfombra" natural de la imagen superior?
Para mí no hay duda...y a ella acudo siempre que puedo ... ¡y sin esperar que me llegue invitación!.

Oudemansiella mucida -Mucidula viscosa-
Boletus edulis
Lactarius fulvissimus

 

Javier espera paciente a aquellos del grupo que quieren llevarse en imágenes a casa todos los detalles de la ruta

Aquí tenemos a Noelia recolectando un puñado de hayucos que comerá durante el trayecto.- ¡Huuum que ricos!-
En el huerto del pueblo hace ya 20 años que plantamos Hayas desde  simiente.
Hoy día tienen un magnífico porte y rondan los tres o cuatro metros de altura.
Teniendo en cuenta que tardan en dar sus primeros frutos a la edad de 70 años...todavía nos toca esperar un tiempo para recoger la primera cosecha propia.
No importa. Tenemos paciencia...

Tramo de senda por el Melojar.

Cabaña la Llongar (1060 metros )
Ganas le quedan a uno de poder alojarse unos días en alguna de estas cabañas aisladas y así poder desconectarse totalmente de nuestra ajetreada vida en las ciudades...
 
Caballo tallado en la puerta de la Cabaña Llongar
 

Aquí han aprovechado bien la verrugosidad de este tronco para colocar el hito indicativo

Pinturas e hitos nos van señalando la ruta a seguir


Los extensos bosques de Redes
Ganando altura por la senda
Dos Hayas se encuentran unidas por el tronco a media altura.
Nos llama la atención la disposición que tienen.
Fotos al canto posando de uno en uno al lado de las mismas.

Sergio y el "abrazo" de las Hayas

Saliendo del bosque ya se divisa la cuenca del río Nalón

Esta zona alta esta dominada por vegetación arbustiva como los Tojos -Ulex cantabricus-
Está resultando cómoda la senda hasta el momento.
Va ganando altura poco a poco a media ladera y aparte se encuentra bien definida por lo que no existe pérdida.
-Bien, bien-


Sobre este promontorio de roca caliza crece un Tejo -Taxus baccata-

Desde aquí ya distinguimos nuestro objetivo del día; El Pico Maciédome
Tan entretenidos que estábamos por el bosque que parece no habernos costado nada llegar hasta aquí.
Esto parece pan comido lo que resta del trayecto al pico.
Veremos después que nos equivocamos al juzgarlo prematuramente...




Llegamos a la colladina Llanu Fresnu ( 1359 ) donde existe una pradera y una cabaña pastoril. Nos quedamos un par de minutos disfrutando del encanto del lugar antes de proseguir por la senda.


Colladina Llanu Fresnu (1359 metros ) con pradera y majada pastoril.
Otra cabañita con vistas que dejamos atrás...


Noelia atraviesa este helechal agostado de camino al Maciédome



Entre las aisladas hayas de altura distinguimos curiosas agujas pétreas...


Noelia junto a la fuente abrevadero
Panaeolus rickenii
Durante la ruta circular encontraremos varios puntos donde poder repostar agua.
Aunque al realizar en época veraniega este mismo paseo no podemos asegurar  que estos manantiales fluyan todo el año. Desde casa tenemos que ir siempre provistos de nuestros botellines de agua y  en cuanto se presente la oportunidad cambiar el líquido clorado por el agua fresca y viva de manantial.

Avanzando por la senda semi-oculta entre los helechos


Sergio y Noelia

Por aquella otra collada con pradera no pasaremos. Quedará abajo de nuestra vertical.


Javier aproximándose a uno de los más bellos balcones de Redes.
 


Collado Llagu ( 1533 metros ) con vistas al bello monte Tiatordos
Soberbia la estampa hacia el Tiatordos desde este collado.
Preciosidad de montaña la que contemplamos.
Es bonita observándola desde lejos y más aun ascendiéndola y desde la cima contemplar los pueblos y el valle del Ponga. Desde luego no tiene parangón...
La ruta de ascensión que tiene desde el pueblo de Pendones es asequible para todos los niveles siempre que evitemos la época invernal.
Podemos ver ruta en el siguiente enlace:
Ascensión del Tiatordos desde Pendones.

También tiene una circular interesantísima desde la vertiente del Ponga al partir del pueblo de Taranes.
Podemos ver esta ruta en el blog de Javier; Paseos por las Montañas

Paisajes de postal en el que disfrutamos una barbaridad
Es cierto que todavía no conozco en profundidad la Comunidad Asturiana y  sus montañas...
Pero de las que sí he visitado, para mi gusto, esta que tenemos enfrente, es la más bonita.

Dejamos atrás el collado Llagu para seguir la senda a media ladera por la vertiente oeste del Maciédome

Vistas al collado Llagu desde la senda del Maciédome

El pico Maciédome y las paredes de piedra caliza que presenta hacia esta vertiente parece inaccesible...Es por ello por lo que el camino bordea estas peñas para situarse donde se modera la pendiente y poder alcanzar el hombro suroeste de la montaña.

Paredes de la cara Oeste del Maciédome


Nos volvemos a sumergir en otro pequeño bosque de hayas.
Antes de que las altas copas de los árboles nos tapen la vistas del pico, observamos que las cercanías de la cumbre están ya ocupadas por otros "lugareños"...

Este curioso rebeco observa nuestro avance desde una posición dominante.

No nos cansamos de andar por el bosque...
El trayecto boscoso es una auténtica caja de sorpresas.
Hongos Ascomicetos y Basidiomicetos se encuentran en todos los rincones del bosque...

Coprinus impatiens

Melogramma spiniferum ¿?

Orbilia xanthostigma
Para la identificación de las setas aquí retratadas he consultado la magnífica "Guía de Campo de los Hongos de la Península Ibérica" de Basilio Llamas Frade y Arsenio Terrón Alfonso.
Por mi parte no soy ningún experto en el tema y el nombre dado a las imágenes de hongos aquí publicadas ha sido el que tras la consulta bibliográfica me ha parecido acercarse más a las características que presenta cada especie y por lo tanto puedo estar equivocado en su identificación.

Noelia ya se encuentra en campo abierto dispuesta a afrontar la última y fuerte rampa hacia el pico

Vista al norte y las montañas que circundan el valle de Pendones.
Superamos un fuerte desnivel por esta ladera. Nos hemos desviado ligeramente de la senda principal para intentar ascender más directos.
 
Aquí es terreno para los rebecos... 
Rebecos -Rupricapra rupricapra-
Bella imagen de un grupo de rebecos en el instante en el que saltan ágilmente de piedra en piedra. 

Enlazando con la senda principal que sube al pico.

Vistas de los bosques de Asturias que se extienden hacia el Oeste.

De los montes situados al Oeste sólo distingo en la lejanía el Peña Ubiña y los Fontanes
 
De las montañas situadas al sur, en la provincia leonesa, me es mas fácil su identificación

Cumbre conseguida. Imagen del Tiatordos hacia el norte con el buzón del Maciédome en primer plano.

 
Vistas sin apenas zoom hacia el Parque Nacional de Picos.
 
En esta foto destacan en un primer plano; el pico Luengu (1785 metros ), izquierda y el pico Zorru (1844 metros ) derecha.
No los conozco...y vistos desde aquí parecen invitarnos a una futura vista.
Los bosques que los circundan y la bella estética de sus cumbres poseen un indudable atractivo que bien merecen una exploración detallada.

Inmejorable vista del Macizo Occidental de los Picos de Europa.
Acercando los Picos de Europa con el zoom de la cámara...
Es espectacular...
Desde este balcón del Maciédome se pueden captar gran parte de las cimas que conforman el Macizo Occidental de Picos.

Algo más alejadas se dejan ver también las montañas más altas del Macizo Central.


Ya ha llegado todo el grupo a la cumbre y juntos disfrutamos  inmortalizando el paisaje
 
Noelia retrata con su cámara esta vista panorámica de las montañas del entorno del Maciédome
 
 
 

Foto de cumbre en el Maciédome; Noelia, Sergio, Javier y Kike
- Oye Noelia...¡Que estoy aquiii!-
 
Los conocidos montes Pileñes y Peña Ten y los bosques por los que algún día espero perderme.

Empezando el descenso del Maciédome por el cordal noroeste


Agreste resulta el cordal noroeste por el que pretendemos bajar del pico.

Sergio, Noelia y Javier en plena tarea del destrepe

Alcanzado este balcón herboso seguimos la senda.

Enorme Menhir natural en la arista del Maciédome hacia Peña el Quemao

Javier posa en la senda con vistas a otro precioso pico que se alza al norte de Pendones.

Volvemos al cordal para continuar dirección las peñas el Quemao.
Nuestro amigo Sergio, que marchaba en primer lugar, ha optado por descender por la ladera oeste.
Decidimos seguirle. No creemos conveniente dejarle sólo y mas aún después del susto que tuvo él la última vez que estuvo en este pico.

Perdiendo desnivel por esta ladera sin senda...

Es en esta pedrera donde enlazamos de nuevo con la senda hitada por la que anduvimos por la mañana
Después de superar unos destrepes marchando monte a través y saliéndonos de la idea inicial de continuar por la cresta noroeste hasta el collado Llagu, conectamos con la conocida senda de la vertiente Oeste del pico.

Vistas al Collado Llagu.. Aunque desde aquí parezca mentira, existe una senda de acceso que transcurre a media ladera.


Atrás queda el pico Maciédome.
La ruta circular que descargó de Internet Javier nos llevaría por todo el visible cordal rocoso para enlazar aquí con el collado Llagu...
Desde la distancia no nos parece tan evidente la ruta por la arista.
El barro y la roca húmeda, omnipresente en esta estación otoñal, parece desaconsejarnos esta opción de descenso.

De nuevo enlazamos con el Collado Llagu (1533m) y el conjunto abandonado de cabañas pastoriles

Javier siguiendo la senda hacia el valle de Pendones

Vistas hacia las Peñas la Cuchiella. tras las cuales se encuentra el collado Pandellanza (1471 metros )

De nuevo detalle hacia las vistas de la vertiente sur del Tiatordos y de las congosturas que presenta al Oeste.
En la distancia ya se adivina la Cabaña Recuenco por la que pasaremos minutos después y la llamada Foz de Congostín.

Sergio y Noelia descendiendo hacia el valle de Pendones

Enfrente el Pico de la Mogrera, a medio camino la Foz de Palombar y en primer plano la Cabaña Recuenco.
 
-Geranium robertianum-  Hierba de San Roberto ¿?
 

Abrevadero-manantial ubicado en la misma pradería donde se encuentra la Cabaña Recuenco

Llegando a las inmediaciones de la Cabaña Recuenco. Un lugar idílico para pasar un buen día con amigos o familia.
Javier avanza en primer lugar en dirección a la cabaña. Por mi parte me entretengo  fotografiando las últimas plantas con flores de este año.
Humedad permanente han conseguido en esta verde pradera  para perdurar en la floración...
 
Ranunculus repens
 
 
Cuphophyllus pratensis
 

Antigua Braña apoderada por la vegetación.

Javier descendiendo hacia la Foz de Congostín por la cual pasa el camino que nos conducirá a Pendones
 
Kike posa bajo este enorme haya con base de piedra
 


Los Picos que cierran por el norte el valle de Pendones también poseen un indudable atractivo

¿?

Aisladas praderas salpican este bosque del valle de Pendones

Trametes versicolor -Yesquero multicolor-

En la Foz de Congostín existen cuevas de escaso recorrido.
 
En la Foz de Congostín han colocado este rústico cercado para controlar el ganado

Amanita virosa
Centaurea ¿?

Esta curiosa seta crece sobre una base de tronco de haya cortado ¿Galerina uncialis?


 

Otras cabañas pastoriles se adivinan en esta ladera boscosa...


Enlazando con la pista que asciende al pico Tiatordos

Entornos idílicos en un magnífico día de otoño... -¿que más se puede pedir?
 
Vista atrás para despedirnos del valle hacia el Tiatordos y de las Foces de Palombar y Congostín. 
Nos da pena que se acabe la jornada montañera...
La ruta nos ha encantado por el extraordinario entorno natural que atesora este Parque de Redes.
Pero es hora de volver a nuestras casas.
No sin antes aprovechar las últimas luces de la tarde para recorrernos las calles del pueblo de Pendones.

Javier contemplando el antiguo lavadero del pueblo.

Foto dedicada a mi primer guía del Parque Natural de Redes
Más de cinco años hace que vine aquí por primera vez.
En aquella ocasión pregunté en el bar del pueblo la mejor manera para ascender al pico Tiatordos.
Y me dijeron que no me preocupara. Me acompañaría el mejor guía del pueblo hasta su cumbre.
Así fue. Otro amigo y yo, confiados, seguimos los pasos de este Pastor Alemán...
En una jornada maratoniana nos llevó por lo más salvaje del valle. Hicimos varios picos y cotas del Cordal Norte-Sur pasando primero por el pico de la Mogrera...
Hubo momentos, durante la ruta, que dudábamos seriamente de sí el cánido seguía la ruta normal al Tiatordos o sí era el rastro de un animal lo que determinaba su rumbo.
Finalmente disfrutamos  y fue muy interesante la aventura.
En honor a ella y para finalizar esta entrada la dedico este fresco poema:
 
En la puerta del mismo bar este día  se encontraba.
Quizás a la espera de que otro incauto preguntara.
Pero hoy ya no será mi caso, compañera y amiga,
que ahora, cuando tojos y zarzas,  las piernas me castigan,
me acuerdo de ti, sí... y de tu ruta sabida.