CUETO AUCINO o PICO HUEVO DE NOCEDO ( 1731 metros )

Foto: Pico Huevo de Nocedo o Cueto Aucino visto desde la cumbre de Peña la Verde. ( Foto tomada durante el verano)

Ruta realizada el día 14 de Noviembre del 2012 

Integrantes: Isabel, Susi, Laura, Ana, Noelia, David, Juan Carlos, Edu, Oscar, Chema y Kike.

En la reserva de la biosfera de los Argüellos, al norte de la provincia leonesa, existen muy bellas montañas. A ellas nos acercaremos en este día de Noviembre para acceder a una de las que más destacan de este valle del Curueño por su estructura de perfecta pirámide de roca caliza.

En los ambientes montañeros la denominan el K-2 Leonés...Aunque la modesta altura de esta montaña no es para nada comparable al ochomil del Karakorum con quien se la asemeja. Tal vez es su escondido y algo dificil acceso para llegar a la aérea cumbre de la pirámide que forma esta montaña lo que le ha dado el sobrenombre con que se la conoce.

En los mapas del IGN viene como el Cueto Aucino de 1731 metros de altitud y en el valle también es conocida por el nombre del pico Huevo de Nocedo. 

Dada su proximidad a la ciudad de León en los que escasos 40 minutos en coche bastan para llegar a las faldas de esta montaña, hizo que un numeroso grupo de amigos tomáramos la decisión de aprovechar la estupenda mañana de este día de Noviembre para darnos un paseo por el magnífico bosque que ocupa la mayor parte del valle del arroyo Fito.

Y a su vez si las condiciones ambientales y físicas de cada uno nos permitía acceder al extraordinario balcón que se ofrece desde  su cumbre la jornada de hoy prometía y mucho en cuanto a disfrute.

Durante la ruta, Laura, grabó en su GPS y durante todo el trayecto el recorrido realizado.

De esta manera se ha conseguido disponer de los mapas 3D que a continuación se publican para que con el añadido y detalle de las fotos que se exponen en esta entrada cualquier otro montañero o amante de la naturaleza pueda acercarse a este valle de la misma manera que  nosotros.

El desnivel acumulado es de alrededor de 700 metros y la distancia de unos 6 kilómetros.

El tiempo en la realización de esta ruta fue de poco más de cinco horas.

Muy recomendable para visitar aunque se debe evitar los días con mal tiempo y cuando la montaña se cubra de hielo y nieve dada la exposición de alguno de los pasos que tiene en altura.

A continuación os dejo con la galería de imágenes de esta corta ruta pero a su vez suficientemente intensa para que nos deje a todos los que participamos en la misma con un recuerdo imborrable.  

Mapa de la ruta realizada. (Cortesía de Laura de Castro).  En círculos he querido señalizar la parte de la ruta que no tiene senda ni camino hitado. En círculo violeta es la zona de montaña por la que se descendió por una pedrera y en círculo azul es la zona del monte por la que se bajó por el bosque de hayedo y los tejos centenarios que crecen en esta cara norte del Cueto Aucino.

Mapa 3D de la ruta realizada (Cortesía de Laura)

Otra vista 3D de la ruta. En círculo azul se encuentra la pedrera de la canal por la que descendimos y en círculo amarillo el hayedo por el que perdimos desnivel hasta dar con una pista que descendía al valle.
Justo donde señalo el "Camino principal"  que se dirige tras haber dejado el bosque atrás hacia la collada del Fito, lo abandonamos para coger una senda hitada a nuestra derecha que discurre la mayor parte por la cara norte del pico.

Desnivel y distancia de la ruta. ( Gráfico cortesía de Laura)

En el kilómetro 10 que va desde La Vecilla hasta el puerto de Vegarada se encuentran las Majadas de Carecio y el camping abandonado del Caserío. Desde aquí parte nuestra ruta andando por el valle del Fito en la boscosa vertiente norte del pico.

Nada más salir de las majadas dejamos a nuestra izquierda una antigua explotación minera. Andamos unos 500 metros por la pista hasta adentrarnos en el magnífico bosque del valle del arroyo del Fito.

Seguimos el camino principal a través del robledal que se extiende por la ladera sur del valle. Este camino es una antigua calzada romana y en varios tramos del mismo se observa el característico firme empedrado.

Por supuesto no pueden faltar los hongos en esta salida otoñal

El camino va dando giros para salvar el desnivel de manera escalonada. Nuestro punto de referencia es el arroyo que discurre paralelo al camino por el que ascendemos aunque la mayor parte del tiempo no lo tenemos visible por la abundante vegetación a ambos lados de la pista.

Aquí son las hayas el arbol dominante pero la extraordinaria biodiversidad que goza el valle nos muestra también magníficos ejemplares de acebos, tejos, fresnos, servales, avellanos, robles, majuelos, rosal silvestre, arces, cerezos, manzanos silvestres...

Aquí el grupo se detiene para admirar unos acebos (Ilex aquifolium ) que crecen en el lateral del camino.

Seguimos avanzando por la alfombrada pista de hojas

En este giro del camino, nuestro objetivo: el pico Huevo, se nos muestra enfrente, desafiante...

Hemos cogido altura y las vistas hacia el valle se amplian con  unos bellísimos contrastes otoñales.
Mirando hacia el noroeste destaca el pico Bodón.

Noelia y todos los que llevamos cámara aprovechamos el momento para retratar panorámicas.

De nuevo otra imagen del Bodón con la boscosa vertiente sur del valle del Fito en un primer plano.

Poco a poco el bosque va dando paso al matorral que crece en altura como las Genistas y varias especies de Ericas.

Una fina capa de nieve cubre parte de la ladera norte del pico. Esperamos que no nos de problemas durante el ascenso.... La senda discurre por esa vertiente y existen varios tramos en los que nos vamos a tener que desviar de lo hitado para evitar las zonas más expuestas debido a la roca mojada y resbaladiza.

En la distancia fotografiamos cerca del cordal de cumbres a varios rebecos.

Aquí hemos dejado a un lado el camino principal que se dirige al collado del Fito para coger la senda que sale a mano derecha hacia el cordal La Campa - Cueto Aucino.

En otras ascensiones a este pico he llegado al collado por la pista principal para después continuar durante un largo cresteo dirección este-oeste hacia el pico Huevo.

Otro alto en esta verde pradera para contemplar las excelentes panorámicas e intercambiar impresiones con los compañeros de esta jornada montañera.

Otra pareja de rebecos que cambian de vertiente tras observar nuestra aproximación.

Parece inaccesible la cumbre del pico y más aun para algunos del grupo que no se habían acercado antes a esta montaña.
- Ya veremos si en el día de hoy, con esa fina capa de nieve, el Cueto Aucino nos abre sus puertas a este extraordinario balcón que se disfruta en su cumbre sobre las hoces de Valdeteja...-

Chema, en un primer plano, es el que más dudas tiene sobre la consecución de nuestro objetivo. Es la segunda vez que sale con nosotros a la montaña y la primera impresión que le ha dado estas abruptas laderas le hace pensar que tal vez sea una ruta demasiado ambiciosa para la idea inicial que se había hecho de este paseo por la montaña.

Otras vistas y desde más altura hacia el norte con el Pico Bodón presidiendo la cabecera del valle del Curueño.

Una y otra vez nos detenemos unos segundos para recrearnos con el paisaje. Es aquí donde recibimos los primeros rayos de sol del día.

Ahora ya tenemos a vista algunas de las montañas que se extienden hacia el noreste. Al fondo a la derecha se observa el pico Susarón y en un plano más próximo se observan la brecha de la Forqueta, el Castribudín y el Sierro Negro.

En estas praderas es cómodo el avance...

 En esta zona rocosa y parcialmente nevada debemos andar con más cuidado.

La senda hitada pasa al lado de esta oquedad donde posan Edu y David.
Juan Carlos, que ya conoce la subida tras haber ascendido a este mismo pico conmigo y con nuestro amigo Didi, avanza en primer lugar.

Las damas del grupo posan juntas y en fila india; Susi, Ana, Isabel, Noelia y Laura.

Laura

Llegamos al cordal de cumbres. Aquí la ruta se hace más entretenida. El abrupto y escarpado terreno de esta montaña unido a las condiciones de nieve y roca mojada ralentiza nuestro avance.

En lo alto del cordal, donde el sol ha secado la roca, no tenemos problemas para progresar....hasta que un corte en la arista de varios metros nos impide seguir.
Regresamos hacia la cara norte del pico, donde continua la senda hitada, para salvar este tramo.

Aquí se nos muestran dos posibilidades para acceder a la pedrera norte que nos conduce a la parte final de ascensión.
Una es donde se encuentra Laura, en esta imagen de arriba, en la que extrema las precauciones para solventar este paso más expuesto.
Otros tantos del grupo hemos decidido perder unos metros más de desnivel a través de una canal ( al fondo a la izquierda ) para llegar al punto donde saco estas dos fotos.

En la imagen se encuentra David trepando hasta el punto de encuentro de los dos grupos.

Acabamos de superar la pedrera y meternos en otra canal noreste hitada que nos conduce a la vertiente oeste del pico: Ruta normal del mismo.

Este tramo que se observa en la imagen es quizás el más expuesto. Se trata de una pequeña y estrecha chimenea en la que hay que trepar con cuidado hasta llegar al hito que marca la salida hacia la cara Oeste de la montaña.
El barro, la roca mojada y alguna que otra piedra inestable hace que busquemos todos los puntos de apoyo más seguros para superar con garantías este paso.
La trepada es sencilla ya que hay suficientes agarres para manos y pies.

Chema llegando a la parte final de la chimenea

El corto trayecto que nos separa de la cumbre lo realizamos sin problemas. Aunque las vistas hacia la escarpada vertiente oeste que cae a plomo sobre el desfiladero del Curueño hace de éste un tramo aéreo.

Disfrutando de los últimos metros del Cueto.

Desde la cumbre retrato a Laura, Isabel y Juancar con el trasfondo de la pared este de peña La Verde. Montaña que ascendí este verano en combinada BTT + Trekking desde la ciudad de León y desde donde saqué la foto que preside esta entrada.
De la misma manera, bicicleta desde León + ruta andando, he subido a la mayor parte de las cimas de este valle: La Valdorria, el Bodón, el Cueto Aucino, el Pico Agujas...
Resulta muy gratificante acceder a estas montañas y subirlas sin emplear medios motorizados.

Vistas hacia el norte desde la cumbre del Cueto Aucino.

Vistas hacia el noreste: La Forqueta, Peña Ten, Susarón...y al fondo: Los Picos de Europa.

Hacia el este destacan las peñas Pintas y el Espigüete.

El grupo en la cumbre disfrutando del merecido bocadillo en un día otoñal excepcionalmente bueno.

Vistas hacia el suroeste: Peña Valdorria, Polvoreda, Peña Galica, Llamargones...

Y vistas hacia el desfiladero del Curueño y los montes de Peña La Verde, el Bodón, Cueto cabañas...

Con el zoom retrato las majadas del Carecio donde aparcamos los coches casi 700 metros bajo nuestros pies.

Zoom hacia el recientemente ascendido Peña Ten.

Zoom hacia el valle de Valdeteja

Foto de cumbre. De izquierda a derecha: Noelia, Isabel, Oscar, Kike, Chema, Ana, Susi, Juan Carlos, David y Edu.

De regreso por el mismo camino al de subida hasta dar con la pedrera en la vertiente noreste del pico.

Aquí todos juntos en la chimenea...¿por qué nadie mirará hacia la cámara?

En la pedrera donde nos desvíamos de la senda hitada por la que vinimos para bajar derechos hacia el bosque de la ladera norte del pico.

Ahora es Eduardo quien toma la iniciativa en el descenso marchando  primero.

De nuevo otras espectaculares vistas hacia la preciosa montaña del Bodón.

Últimos metros de la pedrera antes de sumergirnos en el mágico hayedo.

El tamaño de los cantos que forman esta pedrera nos permite en el tramo final, a los que tenemos confianza en estos terrenos, disfrutar trotando por el mismo.

El grupo posa bajo un tejo centenario.

Curioso hongo en el tronco del tejo. (Laetiporus sulfureus)

El grupo contemplando otro de los numerosos tejos presentes en la parte alta del bosque.

La tensión que han vivido varios miembros del grupo en la zona alta del pico, escarpada y abrupta, se relaja o desaparece al transitar por este acolchado suelo del bosque.

Es un auténtico gozo y disfrute recorrer y conocer este hayedo.

Oscar (foto de arriba) y Edu (foto de abajo) posan en esta zona musgosa.

No existe pérdida ya que la intención es ir bajando dirección norte para dar con el camino que nos llevará hasta las majadas.

Más hongos

Fotos y más fotos a todas las variedades de hongos que observamos a nuestro paso.

Acabamos de enlazar con la pista. Momento de intercambiar impresiones y bromear un poco antes de proseguir el ya cómodo descenso.

Esta pista se encuentra menos transitada que la que cogimos en nuestro ascenso (calzada romana) que llegaba hasta el collado del Fito.

Otra imagen del colorido bosque de la ladera sur del valle donde domina el roble.

Avanzando hacia el Curueño con vista a la pared de roca caliza de Peña la Verde.

-¿Qué más podemos pedir en esta intensa jornada montañera?-

Noelia

En los últimos metros del camino que enlaza con la pista empedrada del ascenso debemos cruzar el arroyo del Fito.
Hubo alguien que quiso pescar el salmón fuera de temporada...con el consiguiente chapuzón.

Vistas hacia el pico huevo o Cueto Aucino en las cercanías de la Majada.

Finalizando la estupenda ruta.

Majadas del Carecio

 Recogemos para regresar en nuestros coches hacia León. Esta vez volvemos por las Hoces de Vegacervera para visitar la casa que tiene Edu a los pies de la Cara sur del pico Polvoreda en el pueblo de Villalfeide.

También regresamos con tiempo para que gran parte de nosotros participáramos en las manifestaciones organizadas para el 14-N con motivo de la Huelga General detrás de la pancarta de Ecologistas en Acción: " Ecologismo o Crisis. Por la justicia social y ambiental."

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A continuación añado otras imágenes realizadas en esta montaña en otras épocas del año:

 

Cerezos de santa lucia, gencianas, claveles de montaña, jacintos, aconítos, hierba de salomón, siemprevivas, azucenas...da muestra de la rica biodiversidad que esta presente en este valle.

 

A la izquierda tenemos una foto de las hojas de un serval híbrido; Curiosa hibridación entre las especies de Sorbus aucuparia-Serval de los Cazadores- y Sorbus aria-Mostajo-.

Arriba una muestra de la calzada romana y a la izquierda Noelia posa en este marco natural del tronco de un árbol.

Y como punto final a esta entrada del Cueto Aucino os pongo una imagen de la flor de una azucena silvestre (Lilium martagon) donde podemos observar a un pequeño saltamontes que ha acogido  esta bella flor como refugio.